Sobre un poema de Gimferrer

Odio a los adolescentes
P.G.

Cómo no odiar a los adolescentes.
Te ignoran en los bares que antes eran tuyos
y sus cabellos huelen como la droga que buscas.
Regresan de la noche con tesoros
y palabras que ya no entiendes,
el sabor de la fruta en sus ojos altivos.
Olvidan el amor que tienen
porque saben que nunca serán viejos.
Ni siquiera te miran
cuando amanece
y eres todo lo que desprecian.

de Jose Luis Argüelles, Pasaje, Trea 2oo8.

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